martes, 31 de agosto de 2010

futuro

y reivindicación...

El amor es como una ola de neblina. De pronto, parece que todo desaparece tras de sí, incluso misteriosamente. Entonces, nos deja ver entre la luz y llena de esperanza el camino. Se abraza entre los árboles, como música. Con el más ligero viento, se restituye, desaparece y vuelve, cual manto sublime. Siempre es bella y, si nos cega por completo, no debemos resistirnos a su blancura en nuestro andar. Por el contrario, simplemente, podemos navegarla dando pequeños pasos, de uno en uno, a medida que nos va abriendo sus senderos ocultos. Y dejarnos sorprender por el secreto que esconde en ella.


Y tú ... ¿con quién descubres la dicha en medio de un suspiro de niebla?

Linda tarde de enamoradas tortugas.

miércoles, 25 de agosto de 2010

violencia

y decepción.

Había una sirena de fuego que vivía enamorada de un hombre valiente. ¿Por qué lo amaba?  preguntó un día la princesa de mar. La sirena respondió: porque él me conquistó.

Pasaron muchos meses y esta sirena latía al ritmo de cada encuentro que tuvo con su amado, le palpitaba el corazón al escuchar su voz, el ansia devoraba su furia en la espera de sus besos y cada día lo amaba un poco más. Así, se llenaba de ilusión sólo del futuro pensar.

Volvió a encontrarse con la princesa de mar, en medio de la lluvia en una noche de luna y, esta vez, le preguntó ¿por qué no estás con él? La sirena respondió: porque él no me quiere a su lado. ¿Cómo es eso? replicó la princesa. Así, dijo la sirena, simplemente así.

La sirena de fuego apagó su llama y aprendió a guardar su amor, sin estorbar más al hombre valiente que la conquistó para descubrir al hombre amigo que la violentó. Comprendió, entonces, que él no la amaba. Y cansada de holas sin respuesta, de no poder verlo a la cara, de no encontrar más sus ojos, de no compartir ni coincidir, de nada poderle ofrecer, de no ser parte de él en ningún espacio de la vida, exhausta de preguntarse con quién estaba él cada día, cada noche, cada mañana, a quién le regalaba él su sonrisa, con quién compartía él sus preocupaciones, para quién era que él se embellecía y guardaba todos sus encantos... en definitiva, colmada de sola estar... y triste de sin ser correspondida amar... simplemente lo dejó de molestar. Finalmente, él no lo habría de notar.


Y tú ... ¿de qué te cansas al amar?

Buen día y felices noches de lluvia queridas tortugas...



domingo, 22 de agosto de 2010

las formas

de la soledad... se resumen al silencio suspendido entre lo que tu mente desea hacer y el tiempo que te toma llevarlo a cabo.




Y tú ... ¿te evades en tus pensamientos o te enajenas en tus acciones?


Feliz semana de lluvia, estrellas y hermosa luna luminosa.

lunes, 16 de agosto de 2010

de enfermedades y algo más...

Hace tiempo que no tenía que esperar tanto para sanar, llegó agosto lleno de la paz que me regaló julio y, sin embargo, me sorprendió enfermándome. 

El problema con las enfermedades virales es que nada puedes hacer para acelerar tu sanación y sólo puedes cuidarte, descansar y meditar mucho. Es en estos espacios, en los que revaloras lo que has logrado y te reencuentras con tu interior, sin nada que te interrumpa, pues no hay nada más que hacer que esperar.

Y el tiempo de la espera es un tiempo grato, siempre y cuando no te gane la impaciencia. Ésta es la ventaja de llegar a cierta edad: pocas cosas logran realmente impacientarte. El tiempo de la convalecencia es también un tiempo de reconciliación y perdón. Es luz que te acompaña, alumbra los nuevos caminos y te llena de calma para retomar fuerzas y regresar al mundo: ya renovado. Es miedo ante la vida y terror ante la muerte. Es sonrisa que acompaña, al saberte cobijado. Es certeza de consuelo. Es paz.

Son días en que, al no poder valerte por ti mismo, te entregas a los cuidados y a la ayuda. E interiorizas tu ser humano demasiado humano. Frágil, vulnerable, simple y común. 

Días en que el sueño no se acompaña del descanso que necesitas y que el descanso no se acompaña del excedente de la pereza, tu cuerpo todo tiene un solo fin: sanar; y eso lo tiene exhausto, mientras duermes y mientras estás despierto. 

Todo se detiene y debes soltar todo lo que te detiene, armonizarte con lo que tu cuerpo necesita y fluir con la armonía del tiempo, pues siempre hay razones más sublimes para todo nuestro acontecer e, incluso, los impedimentos devienen bendiciones de vida.


Y tú ... ¿cómo esperas sanar?


Les dejo un abrazo "influenciado" lleno de magia y paz de tortuga.



domingo, 1 de agosto de 2010

agosto de paz

Ya el año rebasó su mitad y todo empieza a estar en función de su conclusión, los meses por venir anuncian el ciclo que conluirá en diciembre y se va dispersando del aire la libre sensación que acompaña el periodo de vacación. 

Llega agosto y, tras el descanso, todo se invade de paz. Cierta melancolía brota al dejar otra vez el bosque para reanudar la rutina de la semana, extrañaré mucho a Nut, Isis y Ághape; mis fieles compañeras cotidianas. Me reconcilia la certeza de que volver a casa es lo que da sentido al esfuerzo del empleo: y sonrío.

Que este mes nos traiga a todos un sueño cumplido.


Y tú ... ¿qué sueñas cumplir?

Semana de trabajo, sorpresas y nuevas alegrías.