jueves, 17 de julio de 2025

la paz...

 ...condición humana.



Hoy leí un artículo que postula la guerra como una condición humana. En tal caso, desde mi punto de vista: la guerra es un defecto humano. Algo que debe erradicarse de todas las conductas humana. Un error. Y grave.

Me parece muy cobarde conformarnos con que fuésemos violentos por naturaleza. Porque la guerra no es estrategia. Es sólo violencia. Y violencia con estrategia... es sólo perversión.

Lo que nos es propio es amar. Ser iguales en dignidad y derechos. Tener identidad y ser personas. Ser idénticos en tanto distintos. Pares en tanto compartir una misma naturaleza fisiológica.  Impares en tanto únicos e irrepetibles. Y cada uno ser idéntico a sí mismo y diferente de otro ser humano... Tener consciencia. Personalidad, carácter y temperamento. Todo esto junto excluye la guerra en sí. 

No, no somos seres que inevitablemente debemos aferrarnos a nuestros defectos y errores. La violencia sólo nos es propia por elección. Justificarla es un defecto. Comprenderla es la solución para erradicarla. 

¿Qué nos hace realmente iguales? Nuestra posibilidad ética y moral. Somos capaces de hacer lo correcto y renunciar a actuar sin valía. Somos dueños de nuestras decisiones. Para que la guerra acabe basta no querer llevarla a término. Somos seres de paz. Y los caminos del entendimiento mutuo son los caminos humanos. 


Y tú... ¿amas la paz?






miércoles, 16 de julio de 2025

fortuna...

 ... feliz.



Hoy es un día de buena suerte. ¿No les ha pasado mágicas tortugas que hay mañanas en que todo marcha estupendamente? Sin esfuerzos. Como río acaudalado que fluye con suavidad y calma alegría. Pues hoy es un día así. La mitad de julio abre caminos veraniegos que anuncian buena fortuna. Lo que esto sea para cada quien. Habrá quien considere que es azar otros que es destino... para mí es más bien un estado del ánimo. Una armonía con el acontecer de la vida.

Lo cierto es que empezar el día trabajando es una gran bendición. Significa, al menos, que el sueño ha sido reparador y que nuestro cuerpo no está cansado. Augura buen humor y buena disposición para las actividades cotidianas. Abre un resquicio para recibir sorpresas y noticias inesperadas. Yo espero recibir dos ejemplares de mi libro. Extravié el que tenía en casa e hice una inversión en mí misma. A una autora no le puede faltar una sola de sus obras en su librero. 

Por otra parte, mañana tendré al fin cama y dejaré de dormir en el sofá. Lo cual no ha sido nada incómodo. Reinauguré mi estudio de modo más tipo dormitorio. Amplié mis espacios de escritura al resto de mi casa más tipo estudio (loft). Tengo una visita ejemplar que le ha dado luz a mi hogar: mi madre. Y reacomodé un poco la sala más estilo tradicional y rústico, a la vez. Mis espacios vitales son muy acogedores y se caracterizan por el equilibrio y la combinación de texturas y colores. Disfruto de un balcón terraza con envidiable vista. Y mi auto ocupa un espacio único bajo un durazno, ahora ya de vuelta a casa tras largas semanas en reparación. 

Hoy me siento inspirada por invitarlos más a mi vida cotidiana. Es bueno no olvidar charlar de los detalles de la vida con quienes nos acompañan. Recuerden que estamos explorando esta idea de la salud social. No hay salud social si no abrimos las puertas de nuestros hogares con el corazón en la mano y nos disponemos a mostrarnos tal cual somos. No es lo mismo la proximidad virtual y tecnológica. O una foto en una red social. Somos seres vivos, orgánicos y corpóreos que no debemos subestimar nuestros espacios vitales.



Y tú... ¿ya leíste LA IMAGEN DE LA FELICIDAD?




martes, 15 de julio de 2025

amistad...

 ...es.




Queridas tortugas mágicas hoy estoy inspirada en la amistad. Son los momentos de la vida en que todo cobra sentido. Las personas con quienes compartimos nuestra vida cual seres libres. Es un lugar distinto que la familia, el lugar donde nacemos y aprendemos a ser libres. En la familia también hay amistad. La amistad también nutre lazos que devienen fraternos. En familia nos enseñan lo que es amar y lo que es la amistad. Entre amigos se descubre lo que es vivir el amor. Y todo gran amor se finca en una fraterna amistad.

La amistad es un cauce de experiencias compartidas. Es la perseverancia, el respeto y los detalles. Es la certeza de una soledad acompañada. Y de no estar solos. Es una guarida de certezas ante la incertidumbre. Un nido de confianza y confidencia. La posibilidad de sueños comunes y anhelos conjuntos. Es un arrimar el hombro. Un tomarse de las manos. Un llanto tanto como una sonrisa. El reír a carcajadas. Es salud social.

Me estoy familiarizando con lo que hoy surge como un tema prioritario de agenda global. Les recomiendo From loneliness to social connection: charting a path to healthier societies; una publicación de la Organización Mundial de la Salud. El concepto y nueva categorización es, precisamente: salud social.
Tres pilares fundamentales para tomar acciones felices en torno a la salud humana son: salud física, salud mental y salud social. 

Lo cual nos lleva de vuelta al lugar de la amistad en nuestras vidas. El pilar de nuestra dimensión social es la amistad. Las relaciones humanas, en general, son fundamentales para tejer lazos y ser parte de un nutrido y sano tejido social. De la mano de la vida comunitaria como el entramado más próximo, incluida la familia y los amigos. Además de nuestro ser social dentro de una sociedad determinada. Nuestro ser en sociedad. Incluidos el civismo y la legalidad. En donde hacen lugar todas nuestras actividades diarias... el estudio, el trabajo y los haceres cotidianos en aras de nuestro proyecto de vida y subsistencia digna.

Si bien no pudiésemos considerar que la soledad es una enfermedad es importante tomar consciencia del papel que tiene nuestro ser social en nuestra vida. No como un complemento. Más bien como un pilar esencial de nuestra existencia. Observemos nuestro cuerpo: somos un ser abierto a la comunicación. Además... dependemos de nuestra percepción externa y nuestros sentidos para mantenernos vivos. ¿Eso no nos da una pista sobre el hecho de que no nacimos para estar solos?



Y tú...¿amas ser parte de la sociedad?






lunes, 14 de julio de 2025

labores...

 ...de hogar.



Más de una vez he compartido en este espacio de vida: lo fundamental que es tener una rutina doméstica que acuerpe el paso de las horas y de los días. Si bien es un hábito de la vida común, no es tan común tener clara consciencia de tales quehaceres. Y de que dichos trabajos sean hechos con alegría e incluso con entusiasmo. Las tareas domésticas son placeres no obligaciones.

Existen coyunturas vitales que circunscriben más estos dominios del trabajo de casa al ritmo de los desazones de nuestras vidas. Incluso a manera de refugio. Otras veces, delegamos gran parte de nuestra cotidianidad para ocuparnos de otros haceres. Sea cual fuere el caso, es insoslayable la necesidad de mantener nuestro hogar en armonía.

Es el modo de invitarnos a nosotros mismos a habitarnos en plenitud, así como, convidar a nuestros seres cercanos a ser parte de nuestras vidas.

Por otra parte, involucra también un cansancio de vida que transmuta con la edad, la monotonía y la novedad... tanto como con los distintos estadíos de nuestro crecimiento ético, psíquico y espiritual. Sin importar qué: nuestro hacer más próximo es todo lo que sí está al alcance de nuestras manos dentro de nuestro espacio vital.

Son espacios que siempre tienen como pretexto el compartir. Aprender a conjugar los dominios domésticos con la convivencia: es un arte de amor. Incluso si la convivencia es en solitario. 


Y tú... ¿amas tu hogar?








sábado, 12 de julio de 2025

esperanzas...

 ...cumplidas.



En este día, se celebra la esperanza. La cual siempre es cumplida porque la fe con que aguardamos las cosas más bellas, es la fuerza de la esperanza que al no desfallecer siempre es. Así: se cumplen también nuestros anhelos bien aventurados... en consonancia con la paz universal. Por eso, ser humanos es ser personas de bien.


Y tú... ¿amas la humanidad?


Una plegaria de Fe y Esperanza.
En tiempos de guerra
debemos recordar
que somos humanos
porque podemos amar.
En tiempos de carestía
debemos hacer votos
por comprender
que somos llamados a la previsión
y planeación.
En tiempos de cambio climático
debemos olvidar
que fuimos seres de consumo.
En tiempos de dolor
debemos aprender
a ser felices con generosidad
y bondad sin límites.
En tiempos de odio
debemos encontrar
perdón en nuestros corazones.