sábado, 30 de septiembre de 2023

inspiración...

 ...a campo traviesa.



La elocuencia llega de la mano de la creatividad. El acontecer nos muestra los caminos abiertos para avanzar. Con talento: fruto del empeño. Llegan las mieles. 

La luna brotó con todo su esplendor... sacudiendo las aguas y despertando las tierras. Al baile de las olas se sumó: como melodía cristalina; y, en efervescente vuelo de amor, se envuelve a la mar. Bendecida.

Y bueno, ahora que se arrima el octubre... de amor: la celebración octogenaria que comulga, al cierre de septiembre, las Iglesias renovadas tanto como la Biblia, en conjunción con la fertilidad de la cosecha próspera a lo largo de Oriente y de Occidente; es un buen tiempo para abrazar el destino en que la balanza ocupa el arco que abre la vista de la Tierra hacia el Sol. Bajo el signo de Libra. Y viceversa. Bajo el signo de la Rosa. De ahí la guarda Angelical que en 20 Misterios honra la pureza, la gracia, la gloria, la luz y el poder de la Santa Cruz. Al unísono. Con Fe. Bienvenido el mes en que recibimos a nuestra Señora de Paz. Amén.

Son tiempos de asombro y de dejar pasar la mundanidad en su acontecer hasta ver el retoño de su brillo con verdad. La política puede espera cuando su gesta es todavía tan precaria. Al grado de no estar por visto lo que en realidad será el escenario electoral en nuestro país. Son días de abrevar del milagro de la naturaleza al nacer cada día en su inmensidad: con la certeza de que estamos vivos y somos felices. Y dejar a cada quien en su hacer. Vivir y dejar vivir: con respeto. 

Es una época para regalarnos con desbordada alegría nuestros tesoros del alma. Despertar a la realidad sin disimulo y con franqueza, en aras de la justicia brindada con bondad. Recibir con generosidad lo que una mano solidaria nos quiera brindar, tan sólo por amor. Y ser leal a uno mismo si acaso tal abrigo fuese negado, tan sólo por libre voluntad. Con convicción en que la gratitud es dar sin recibir y recibir con reciprocidad. Confiar en un futuro feliz... sin temor a las contingencias del presente. Dejar ir lo que no fue... ni será: porque no es. Y abrir las alas de la virtud para el cielo colmar.

Por mi parte, les quiero regalar la noticia de mi primera publicación LA IMAGEN DE LA FELICIDAD. Si despierta su curiosidad: abracen la lectura. Si no es para ustedes: déjenlo pasar. Si al colmarse de estas letras, encontrasen dicha: aférrense con fuerza hasta el final. De lo contrario, sin pena ni bochorno... suelten aquello que no es de su satisfacción. Pues sólo se vive una vez y cada instante es magia que no debemos desperdiciar jamás: en algo que no nos haga feliz. Y si algo conmigo quisieran compartir de lo que se vuelve propio una vez que se lee por sí mismo: feliz soy de dialogar tales experiencias y adivinar si es que en mi voz hubo un susurro de mi ser o fue un eco de alma ajena lo que conjugó de sentido aquello que quise componer. Un libro se escribe una vez: pero cada vez que se lee se recrea de formas inimaginables. Me anima poder asombrarme de todo lo que no imaginé que podían significar mis palabras una vez que alguien más las hace suyas. De lo vuestro nace la inspiración... de lo mío propio: la creatividad.



Y tú... ¿despliegas tus alas ante el vuelo de la verdad?




one two three...
¡Qué Caramba!

Sean felices
mágicas tortugas...
que habitan en
mi caparazón.


Y al cierre del 7
(que es 6 y 5 a la vez)
...quiebra en el 8:
el canto de lo que
no se dice al revés.
Con el mejor vino:
de su caparazón.
Ad Infinitum


miércoles, 27 de septiembre de 2023

distancias...

 ...añosas.



Engaños y desengaños enlazan el concierto de un pasado lejano en el cual ya nada es familiar. Con extrañamiento. Con serena y conforme reconciliación. Sin memoria. Sin otro pretexto que la certeza de una vida hecha tan sólo por amor. Recta. Honesta. Franca. Entera. Plena. Fuerte. Legítima. Feliz. Con honor y valentía. Llena de logros y sueños cumplidos. Un vivir sin miedo.

Lo innombrable no tiene cabida en el perdón de Dios. Sólo la buena voluntad cura la herida que llaga el tropiezo de un andar egoísta y forjado de ambición. Para acrecentar el corazón: el libre albedrío debe cumplir con la ley y entregarse con bondad. El esfuerzo de la verdad es dado a pocos y sólo con los años se logra alcanzar la realidad con justicia. El alegre canto de la Luna, alumbrada en el corazón del Sol, es la certeza del milagro de la creación.

La roca que al abrir suspiró junto a los murmullos de la antigüedad... brota en flor sin hierro. Con verdad: es lo único existente. Un tiempo sin doblez. Una pauta sin revés. En ascensión. De la mano de la bondad verdadera. En vuelo abierto hacia el mar divino. Aguas colmadas de incandescentes seres sagrados. Ancestral belleza sapiente.

La ternura solitaria prende la antorcha de la Libertad al ritmo luminoso del esplendor universal y late al instante de una burbuja acuosa en plenitud. Se abre el sentir milenario de un mundo hecho de tiempo. En el salto espumoso cuyo vértice salva, brotó sin esfuerzo el infinito: una vez que al mirarse sólo pudieron amarse. Sin memoria celeste y con certeza presente del día fatal. Con sonrisas y sin disimulo recrearon una vida escrita con el fulgor de antaño. Cuando todo empieza por primera vez... nada detiene la consagración cuyo destino abre la concepción originaria. Y así fue como sin distancia, y sin años, el amor primigenio triunfó. Cuando la corona se iluminó a las 12 en punto: Alzó el vuelo el Búho de Minerva, cual Atenea partida en tres.  Para en más de 8mil millones morar... con su manto cubierto y un sólo corazón albergar. Más de una vida sembró para los dos conos cavernarios unir en real santidad. Sin juicio y en paz. Con perdón: su palabra brindó. Así... el cielo se abrió.

Al nacer a la vida nueva nada es pequeño. El alumbramiento de todo lo perdido es la victoria cuya cosecha hilvana los sueños carentes de dolor. El viento anima hacia la malla titánica conjurada desde el principio de nuestra era. Las almas vuelan, se acercan y recrean. Los años se nombran en un abrir y cerrar de ojos. Y la distancia no es ya un lugar: es sólo la intuición de nuestro despertar.

Quienes quiebran el cerrojo con cobardía, encuentran su hora frente al espejo. El día en que no pueden ocultarse ni de sí. De todo lo demás... Ángeles y Arcángeles trazan con amor el único bien que se puede abrazar: un corazón colmado de Fe. La meta del maratón es el diamante completo ahora que los terceros son el primero, cinco fueron y en cuatro se fundieron los anillos del poder (el último canto de amor tallado en piedra): para siempre poderse encontrar... sin falla. Una promesa es una promesa... palabra dada: hecha está. De 3 en 3... de 5 en 5... cuenta de ida y de vuelta hasta el 111 nombrar: one and only. Los expulsados del Reino de la Paz tendrán que olvidar e iniciar una vida sin el ayer que fueron. Sin más.



Y tú... ¿cierras con lealtad la llave del quebranto añoso?



Brindo...
con el cántaro
colmado
de magia de tortuga:
por los nuevos comienzos...
que al nacer sin quebranto
dejan atrás lo que no vale
recordar.
Semana de encanto
para ustedes. Gracias.





"pendant la éternité"



martes, 26 de septiembre de 2023

otoño...

 ...de LUZ.



Al llegar la plenitud del año, el aumento de todo lo cosechado, con desapego... nos acompaña un sentimiento de balance; cual viento fresco: con alegría, ternura y complicidad; en el tiempo justo que nos permite desprendernos de la huella del ayer para abrazar la cautela del buen pensar sobre la honestidad de nuestras vidas y el regocijo espiritual de un crepúsculo sereno. La clara confianza en que el equilibrio entre el día y la noche nos alumbra para caminar ciertos hacia el hogar que alberga nuestro corazón. En cada uno de nuestros caparazones (de mágicas tortugas) duerme el silente amor valiente que abre su latir con verdad. El aliento de Perséfone: quien abrirá el umbral del inframundo... una vez más; de la mano de la catrina bendecida; une en un solo mundo la dicha del eterno vivir. Bajo el sino de Venus: estrella de la mañana. El festejo de la Luna: abundante gracia. Radiante prosperidad. Fuerte salud. Emotividad sabia. La era de la creación preexistente y de su perpetuidad. Como quien se hace a sí mismo: llega el día en que libra con encanto, elegancia, diplomacia y buen gusto... la belleza en su acontecer. Al aparecer de las escalinatas se abre el gran fuego eterno y con su verdor incandescente: brillan las plumas coloreadas de la serpentina. En el punto cardinal en donde el aire despierta. La magia se desprende de la piedra céltica. Se funda el Sol en su quinta estación. Cual ave libre que pasa y enamora con armonía al encarnar en su piel amada. Así... se consuma el orden divino. Lo celeste materno: invencible trinidad. El arado que hace del desierto un mar de consuelo. Con arte y con ciencia. Desde el páramo los cráteres forjan el hierro de la amalgama matrimonial cual seno que abriga en harapos el cristalino río que vuela a través del cielo rocalloso. Imán de jade que hace visible lo invisible cual Artemisa olímpica que yace dormida sin prisa y con paz. Manos galantes entrecruzan la corona en oración y hacen brotar la vid con el oro seco cuyo resplandor adorna el altar de la comunión. Con asombro. Fraseo sagrado del hallazgo legendario. 

Los bosques se visten de colores mostrando sus mejores emblemas. Los 7 árboles... destacados son: El Roble y padre; el Avellano y prudente; el Castaño y generoso; el Abedul y flexible; el Fresno y venerable; la Haya y fecunda; el Arce y Serbal, los encendidos. Sueltan su pelaje abriendo la alfombra para ver a los dioses volver. Su cántico se colma orquestando las brisas originarias del océano. Albergan nuevos comienzos, anuncian la pureza tornasol en terciopelos: que se evapora en el manto salino y conserva la fuente del salto que encumbra en cascada las aguas del caer de las montañas. Despojándose de la suave lluvia que despierta el olor de la tierra para secar lo que en el invierno será esponja en cuyas raíces podrán albergar. El Encino abre su bellota y cura todo dolor. Su voz es abrazo y en su forma duerme, con misterio, el grande antaño. Así... se surcan los troncos de Temis... Atlas... Cronos... y Zeus. El gran reino feliz de la edad dorada: el mundo animado. La dicha sublime del Edén. Bendita la floresta: cuyo arco es el faro del sendero de la humanidad. Cuyo aliento es latir infinito. Guardianes son de la miel en flor. Dotan el oxígeno vital. Respiran mientras duermen y navegan entre nubes en sus sueños de vigilia. Acarician nuestro rostro con frescura plena como si quisieran anunciarnos con gracia la imagen de la felicidad. Y nos regalan el otoño en consonancia con la majestuosidad del astro solar. Sabios son. Sagrada belleza en comunión. Ancestrales y celestiales. Son hogar. Son navío. Son recuerdo de la memoria. De sus frutos nos acrecentamos. De su follaje nos alimentamos. De sus selvas nacimos. Al contemplarlos: nos nutrimos. En su corteza envejecida (nacida madera): labramos y habitamos nuestro ethos. Y, en su silencio... encontramos nuestra verdadera paz sin soledad. Son amor.



Y tú... ¿recibes los vientos fecundos cuando ves en ti el añejo reflejo de tus cualidades?








Gran inicio de semana...
tortugas de ayer,
vigías de hoy,
vísperas del amanecer:
de la mano del susurro
de los vientos mágicos
cuyo otoño despiertan.



"pendant la éternité"


viernes, 22 de septiembre de 2023

los caminos...

 ...del infinito.



El pulso discreto del contar vuelve ilusoria la real continuidad del acontecer que significa nombrar el tiempo. Para mirar un punto en el trayecto de nuestro horizonte, nos separamos de la multitud, la completitud, el contexto, el paisaje, los linderos de nuestro ver... para situar en el centro de nuestra atención un cuanto aislado: creando la ilusión de su existencia.

En nosotros no habita la conciencia del universo. Ese concepto que siempre incompleto en nuestra mente nos remite a algo mucho más allá de nuestra percepción. Esa idea vaga que alberga un sentido de realidad fuera de nuestro propio planeta. Mientras más lejano es el suspiro de aquello que tratamos de nombrar, sin forma conocida, aparecen imágenes sugerentes de todo aquello que no podemos tocar. Tampoco comprender. Mucho menos trazar con la letra un sentido capaz de significado. Sin experiencia no hay lenguaje posible. 

Es quizás el sino de nuestra humilde capacidad de pensar: albergar con sorpresa el acontecer de un mundo desconocido ante nuestros ojos... mientras aprendemos a mirar con verdad todo aquello que sí se finca en nuestro principio de realidad. Todo aquello que nuestros sentidos sí pueden aprehender. La comprensión nuestra está siempre limitada al convenio subjetivo que, una vez que la ciencia lo contrasta vía empírica, deviene en acuerdo objetivo. Objeto limitado... a la luz del crecer de nuestra capacidad de comprender el mundo del cual somos parte: la Tierra en que habitamos. 

Infinito es todo aquello sin contorno. Sin otro límite que su existencia misma en tanto esencia acabada. Sin cuenta final... sin última unidad. El latir luminoso de la eternidad. Algo difícil de pensar por nuestro cerebro necesitado de particularizar los objetos que perciben nuestros sentidos de tal modo que se puedan nombrar.

Atravesar los caminos del abismo vital, dentro de una realidad que posee sus propios parámetros y que siempre está a merced de la leyes de la naturaleza, es navegar en una selva indomable en donde sólo podemos saber que estamos vivos si estamos despiertos. Y sólo nos queda abrazar con pasión la llama viva de la belleza que nos comulga. Entregarnos al sendero sin otra paz que la nacida de la certeza de la majestuosidad de la vida. Conscientes de que vivir es amar y nunca querer dominar.

Ni más ni menos somos. Ni mucho ni poco valemos. Somos un gran milagro... somos el corazón que puede decidir si amar o evitar escuchar aquello que simplemente es evidente y en verdad. Somos la mano que puede poner intención en un hacer, aparentemente, superpuesto al orden de las cosas mismas. Cada obra creada en nuestras propias vidas es también un orden natural que no puede interponerse a la realidad misma del tiempo. Nada en nosotros es artificial. Y lo propiamente humano es aprender a distinguir la diferencia entre la fantasía y el orden natural. Y lo único que nos pertenece como especie del reino animal es la libertad de actuar con bien y renunciar a dañar o lastimar aquello que nuestra mente no sabe pensar.


Y tú... ¿decides amar con bien... eliges los caminos del buen amor... o te conformas con renunciar al infinito y volverte una anomalía moral incapaz de vivir con bondad...sin rozar un instante la belleza: sin amar? Y tú... ¿quién eliges ser? 



Amén.
Dulce viernes...
que nace al otoño/primavera
alumbrados 
tras un verano/invierno dorados...
Amen con bien: mágicas tortugas
amigas. Gran abrazo de luz, sol, viento y mar.
Feliz fin de semana.
...Hasta que la luna llena nos llene de inspiración ancestral.
Lindo día.





"pendant la éternité"


jueves, 21 de septiembre de 2023

hablemos de...

 ...la oposición.



Poco suave es constituirse como "Frente" (https://dle.rae.es/frente). Más certero es hablar de frente: ser franco. Con el rostro descubierto. Decir con verdad... sin necesidad de ocultarse; menos aún: enfrentarse. Una contienda electoral por la presidencia de la República no puede entenderse como una batalla invencible. El diálogo y la razón, la ley y el orden, la democracia y la libertad: son tres mancuernas suficientes para dirimir la justa competencia entre dos opciones políticas en aras del bien común. En tiempos modernos no existe mando alguno: se llama Gobierno. Tales jerarquías sólo son propias de los mandos armados... por motivos obvios: preservar la vida de la ciudadanía. Lo antiguo y originario es sagrado. Y la potestad arquetípica de todo lo que conjuga la historia de la humanidad no está al alcance de caprichos de gabinete.

Contamos con dos precandidatas en franca confrontación: en oposición. Sin consulta y con encuestas verificables, llegan ambas al arribo de una larga cuesta. Si tomamos en cuenta que han gastado ya gran parte de sus baterías al anticipar el escenario del imaginario social como si hoy se estuviese dirimiendo quién es la persona a cargo de este país. El presidente en funciones se sigue llamando Andrés Manuel López Obrador. Grandes retos les proponen, a las actuales esquelas presidenciables, las expectativas previas, la precampaña y la, todavía lejana, campaña electoral. El voto ciudadano sigue siendo, en estricto sentido, un espacio vacío y abierto a disposición de la única voluntad propia de cada individuo empadronado por el INE. Y esto es lo único cierto. Una encuesta no es una urna. Una preferencia de opinión pública no es un voto. Y una vez concluida una elección no se abonan votos en una cuenta bancaria hecha de falsas canicas.

Cada día de elección se abre una nueva partida dentro de la cual nadie conoce a ciencia cierta el resultado legítimo. Y ésta es la legalidad que nos constituye como Nación. Tenemos una Constitución vigente. Carta Magna que exige se cumpla con el deber ante la población que asumen todos nuestros gobernantes, administradores públicos y representantes. Por lo demás... la suma amplia de candidatos en disputa el próximo año tienen una sola prerrogativa: ser honestos con quienes tenemos la voz, el veto y el voto; en plena libertad con una voluntad propia y distinta en cada uno de nosotros. La sociedad pide respeto. Pide medios de comunicación al servicio de la verdad y con pertinencia: voces independientes y sin incentivos en la vida pública y/o política. Gracias... La Democracia vive y la Constitución está vigente. 

El tablero no se ha abierto y todavía no conocemos nuestras opciones reales. ¿Serán sólo dos candidatas? ¿Habrá más participantes en la palestra? ¿Las actuales elegibles, ya ratificadas y nombradas (suponemos registradas en tiempo y forma ante el INE) cumplirán con todos los requisitos legales debidos para ser quienes lleven su nombre en la boleta? Vivimos un proceso... sin resoluciones claras todavía. Son tiempos de renunciar a las fantasías y apegarnos al principio de realidad con base en la legalidad. Líbrennos de verlos hacer el ridículo, de constatar que ignoran el Estado de Derecho, de desilusionarnos ante el hecho de que poco sirven al pueblo y mucho escatiman en el futuro tan sólo para arrancar las mieles de la esperanza en aras de agendas mezquinas dentro de las cuales sólo aspiran a sus propios propósitos, a su ambición, su ego y su vanidad. A su beneficio personal. México es más y merece mucho más de todos quienes se procuran a sí mismos como futuros gobernantes, administradores públicos y representantes.

Dejen de confrontarse entre ustedes, entre los poderes y entre sus opositores. Insisto: diálogo, ley y democracia... son la única clave para garantizar el artículo primero constitucional y para asumir un compromiso colectivo con la libertad. Y que la procuración de justicia se vuelva costumbre sin estar más a debate político. Así sea.

La gran ausencia es la agenda de trabajo, los proyectos de desarrollo, las propuestas viables, las soluciones, las alternativas. Ideas aisladas. Conceptos vacíos. Arenga verbal. Romanticismo político... sin altura de miras. Sin objetivos claros. Sin diagnósticos loables de abrir análisis serios de política pública. La economía tambaleándose: sin certezas financieras para la garantía de un proyecto de vida feliz para la población. El terror: la carta bajo la manga como aliento para llenar urnas. La vaguedad: el espacio en el cual se niegan a comprometer su palabra ante el electorado. La emotividad: nostalgia de un tiempo perdido y un futuro siempre prometido pero nunca cumplido en paz. La violencia: cortina de humo y nicho de disputa entre las fuerzas opuestas que pretenden ser dueños de un país al que ni siquiera saben amar. Porque amar es con respeto. Somos individuos, personalidades jurídicas, personas de carne y hueso: conciencia de sí con voluntad y deseos por cumplir. Sentimos y pensamos. Escuchamos y reflexionamos. Somos seres con memoria y con evidencia también de la memoria histórica. Pedimos respeto. Y con honestidad esperamos poder confiar en que son capaces de ser sinceros con quienes invitan a brindarles su voto de confianza el día de la elección y que están dispuestos a asumir la responsabilidad por la que arrebatan con tanto ahínco el puesto elegible. Ser Presidente de una República es antes que otra cosa: una gran responsabilidad.

La rendición de cuentas va... y la historia juzgará quiénes son héroes y quiénes fueron sólo truhanes.


Y tú... ¿sabes que la campaña presidencial 2024 no ha empezado?




Qué viva la Paz
en este su día...
llena de Magia de tortuga.
Amén.




"pendant la éternité"