miércoles, 31 de marzo de 2010

alegría

de sonrisas y amor.

Mis queridas tortugas, conforme pierdo más cabello, corroboro que lo que alimenta la cotidianidad de salud es la alegría. El saber sonreír a pesar de la adversidad, el saber reír ante los problemas, no perder el sentido del humor, en medio del más sentido llanto, ironizar tus errores, con dicha bailar y aún, desafinando, cantar.


Y a ti ... ¿qué te ilumina a medida que descubres tu vejez?

Descansen alegres, mis queridas tortugas.



domingo, 28 de marzo de 2010

el alma

"¿De qué manera resarcir a mi alma todo lo que le he arrancado en aras de la verdad?"

...

Así se interrogaba una mañana la estrella filosófica de la galaxia azul.

De este modo, inció una disertación sobre las decisiones que los seres humanos toman a lo largo de sus vidas, y sobre lo que estamos dispuestos a dar por aquello que creemos es correcto.Y sólo una cosa pudo concluir: "
Quizá la luna se deja de añorar cuando encuentras al alcance de tu mano la realización de tus sueños."

El pasado nos deja de lastimar cuando termina el esfuerzo de añorar y se nos concede, al fin, la plenitud en nuestro propio y seguro territorio del presente futuro.


Miramos al cielo cuando estamos solos y buscamos en el firmamento el complemento de nuestro corazón; cuando lo encontramos, miramos a la tierra para sembrar la vida que antes soñábamos mirando las estrellas. En el camino, el alma enfrenta grandes pruebas, algunas por elección y convicción, otras por azar o magia del destino. En cada batalla del alma, el cuerpo deja un pedazo de sí y cuando, al fin, cada corazón encuentra su abrazo, inevitablemente, empieza la sanación: el tiempo de descansar las largas jornadas y los adversos caminos, el tiempo de resarcir el propio esfuerzo y recibir el amor cultivado durante las travesías.

Y un gran cansancio nos invade de pronto. El cual es ya señal de que una parte del viaje ha llegado a su fin, para darle cabida a la aventura que llevará el sello de tu nombre y que nadie podrá rastrear más que tú.


Y tú ... ¿prefieres estar en la luna o en tierra firme dibujar su silueta?

Abrazo de luna, queridas y mágicas tortugas.




viernes, 26 de marzo de 2010

una vida entera

Por momentos, el tiempo del bosque se interroga sobre un secreto que, desde las raíces del cielo, recibió en forma de pregunta.

¿Será posible el amor profundo? ¿con pasión y, al mismo tiempo, con la serena solidaridad de compartir sin esfuerzo los largos silencios, las noches de insomnio, las preocupaciones comunes y las propias; en la cotidianidad, aspirar a la fidelidad en pareja e incluso, con soberbia, soñar con el compromiso de toda una vida?

Ciertamente, se abre esta posibilidad cuando dos voluntades deciden hacerse una, sin perder su autónomo deseo, pero desprendidas del que pudo ser un proyecto de vida en solitario.

De ahí, quizá, la duda que a algunos invade sobre si ésta o aquélla fue la mejor decisión, de ahí la incertidumbre previa a la resolución, cuando la vida nos ofrece la posibilidad de vivir en par o seguir siendo non.

Finalmente, mis queridas tortugas, a cada caparazón le ha sido regalada una música y no hay armonía más que entre dos.

¿O será que es posible vivir sin amor?
... Al paso de los años, sólo una cosa conserva su sentido, más allá de las aparentes recompensas de las estructuras de sociabilidad humana: aquello que supimos dar, las palabras compartidas y los abrazos entre risas y sonrisas.


Y tú... ¿prefieres bailar o soñar?

Dichosa vida con mágica música de tortuga.





martes, 23 de marzo de 2010

juventud

tesoro perdido...

Si miramos a las personas inmersas en su proceso de vida, debemos reconocer, incluso antes que su igual humanidad, sus expectativas, la suma de sus anhelos y deseos, su identidad única que nos impone una voluntad otra a la nuestra.

Ser joven biológicamente es un fluir natural de la vida, queramos o no, nuestro cuerpo crece y renace a la vida adulta haciéndose otro. Muchas fantasías habitan el mito de la juventud, hay quienes sienten que es toda la felicidad y quienes reconocen no querer repetir por un instante ninguna de sus incertidumbres.


Ser joven, biológicamente, no necesariamente implica la actitud de vida en la cual el espíritu se rebasa ante las expectativas del mañana devorando el hoy, como si el instante irrepetible, fuera una puerta a la eternidad. Sin embargo, cuando la biología apenas florece, esta eternidad nos descubre el infinito de nuestras emociones sin advertirnos sobre el ciclo de estaciones que nos sucederán. De ahí que la riqueza de preservar el espíritu joven sea el dominio finito de estas emociones que goza, sin más, el instante presente, pues ya no le preocupa la eternidad y se ocupa del futuro cada día al despertar, con suave paciencia. Esta voluntad es la que madura el joven deseo sin perder la pasión.

Cuando decimos de los jóvenes, de quienes nacen al mundo tras despedir su infancia y aún saboreando la adolescencia, decimos de quienes forjan el sueño eterno y sienten infinitamente. De ahí, que su presente necesita caudales que abran paso a todas las dimensiones posibles de cada uno de sus proyectos de vida, lo cual impone retos inalcanzables a la comunidad, ya que la suma del total de las expectativas se vuelve una tarea casi imposible de cumplir. De tal suerte, que sólo los proyectos comunes incrementan la realización de sus fines.

Satisfacer esta forma de comunidad delega responsabilidades intergeneracionales, ya que el mismo derecho tienen todos de realizarse con dignidad. Es esta voluntad generosa de convivir más allá de la biología joven y transitar hacia la joven espiritualidad lo que hace posible que tenga sentido para jóvenes y no tan jóvenes ponerse en el lugar del otro y aprender recíprocamente. De otro modo, en el imaginario de la atesorada juventud, se diluye la vejez como una forma de vida y se castiga la inmadurez de toda utopía.


Y tú ... ¿descubres los secretos de tu vejez y preservas tu espíritu joven?

Hasta mañana felices jóvenes y viejas tortugas.



lunes, 22 de marzo de 2010

raíces

Dentro de cada rosa habita la semilla para un nuevo rosal, así, la vida se replica una y otra vez y la madre naturaleza abraza el desamparo de las gotas de rocío que, cual lágrimas, limitan el florecer de sus semillas y esconden de la luz la belleza de sus pétalos.

Esta mañana, la rosa azul cuida de su salud, amanece débil para curar y decide apelar a su madre natural para encontrar consuelo. Con dulzura escucha respuesta y una voz llena de fe la anima a recordar cuáles son sus raíces y en qué radica su valor.

La rosa, solitaria, recibe el sol del atardecer, tras el consejo que le ha sido dado y descansa en calma al sentir que sí existe una tierra que le pertenece y que la cobija, en la que ella no sólo es bella y valiente, además, es valiosa y única. Casi un Edén.

En ello radica la magia del misterio de la reproducción: en el vínculo poderoso del amor filial... La voz que te hace por un momento olvidar los temores y las preocupaciones, la ternura que te hace sentir amado sin condiciones, el llanto que te confiesa cuáles son los valores verdaderos de la vida, la risa que vuelve ridículo tu pequeño infierno cotidiano, la ventana que abre perspectivas en tu horizonte cuando por descuido dejas que se nuble tu dicha por vivir y permites que los problemas roben tu sonrisa.


Y tú ... ¿hacia dónde miras cuando pierdes tus raíces?

Hasta mañana tortugas ... no olviden abrazar la primavera y bailar en esta primavera.





domingo, 21 de marzo de 2010

cuento de primavera

Lleno de sol el día abrazó el renacer de cada año, este espacio mágico en que la naturaleza nos invita a revivir tras la pequeña muerte del invierno. Cayó la tarde casi imperceptible pero entre sueños supe que fue un espectáculo realmente bello.

En esta época, las mariposas anuncian amores y las parejas se vuelven a enamorar como si fuera la primera vez.

Las soledades se llenan de esperanza ante la posibilidad de que sea este año en que se despidan para siempre y sus corazones descubran a sus parejas soñadas.

¿Qué no debe faltarnos esta primavera? Una mano que nos tome con certeza, un amanecer de sonrisas, un alma que comparta contigo sus noches de luna, un compañero para ver las estrellas, un cómplice amigo que te cuente sus cuitas, un abrazo de vida que dure por siempre... es decir... no nos debe faltar entregarnos a amar.


Y tú ... ¿qué gustas de la primavera?

Hasta pronto amigas tortugas.




sábado, 20 de marzo de 2010

la estupidez

y la credulidad son hijos torpes de la inocencia.

Por un lado, la estupidez nos remite a todo aquello en que confiamos cuando no sabemos algo sin saber que no lo sabemos. Se acompaña de cierta necedad y de otro poco de necesidad, ante el deseo de creer en que lo que queremos que sea verdad es, efectivamente, verdad. De ahí que, cuando decubrimos nuestra estupidez, en su lugar quede un poco de rabia y tristeza, provocadas por el asombro de haber sido tan ingenuos.

Por otro lado, la credulidad nos convierte en objetos apetecibles para el engaño y casi con cierto gusto nos entregamos a ella, como si, al ser vulnerables, ganáramos el terreno sobre el culposo abuso ajeno.

Sin embargo, qué sería de lo humano sin capacidad de creer ciegamente y qué tan poco humanos seríamos sin nuestra estupidez.


Y tú ... ¿qué aprendiste este invierno?

Hasta mañana... día en que al fin nos abrazará la primavera.


viernes, 19 de marzo de 2010

día de nuevo sol

Termina la jornada y llena de ilusión, nuestra tortuga mágica prepara los detalles para visitar el manantial en el que todo se vuelve bello, el esfuerzo se recompensa y la ternura te embriaga.

Y tú ... ¿ya conoces cuál es tu manatial?

Dichoso fin de semana mis amigas tortugas, disfruten el latir de sus caparazones.

jueves, 18 de marzo de 2010

linda mañana

El cielo y la calma, tras los tormentos, te hacen deleitar sabores y sonidos que olvidas cuando te devora el apego y la mezquina sujeción a tu indiferente individualidad.

Durante las últimas semanas, la tortuga mágica ha estado presa, casi enjaulada, conociendo un poco más de sí y descubriendo mejor su futuro. En el camino, águilas y gaviotas la confrontan con cierta crueldad, sin embargo, la paciencia y generosidad de su caparazón una y mil batallas logran librar.

Su recompensa... la certeza de un encuentro con magia de tortuga.


Y tú ... ¿conoces el centro de tu fuerza?

Hasta mañana y dichoso día de paz.


martes, 16 de marzo de 2010

dilemas paradigmáticos

y no tan paradigmáticos... que radican en un mismo fundamento: la incomprensión mutua de las diferencias ajenas.

Y tú ... ¿conoces el límite de tu tolerancia?

Hasta mañana.






sombra

desconfianza y, a veces, traición.

Este es un cuento casi de terror, en medio de mi romanticismo de vida y a pesar de estar completa en mi corazón, me surge la inquietud por recorrer las cuitas de otros mundos posibles, quizá más mezquinos y, ciertamente, menos amorosos. Como para recordar que aún nos falta mucho por completar en esta misión por construir un mundo de paz para nosotros y para quienes nos acompañan.

Misión que algunos cuestionan. Hace poco me preguntaba una amiga porqué yo insisto en apelar a lo justo y demando del otro su compromiso con aquello que considero correcto. Lo cual me ha interrogado mucho más allá de las apariencias, en especial acerco de "aquello que considero correcto" y la arrogancia implícita en nuestros deseos de bondad. Sin embargo, me niego a renunciar al exhorto por la justicia como una forma de vida, no sé si inevitable, pero estoy segura obligado ante el contexto en el que convivimos como seres humanos hoy. Contexto sembrado de incontables injusticias, mejor dicho, contables... pues aunque sean tantas que parezcan infinitas, precisamente, el no aprender a mirarlas una a una las vuelve invisibles, las hace normales y nos acostumbra a ellas como si no tuviéramos escapatoria o no quisiéramos aprender a vivir dignamente felices.

Es así que recuerdo a un pequeño chimpancé que habitaba en la caverna de Platón convencido de que era el mensajero de la luz, sin perctarse de sus cadenas y de todas las ilusiones que ante sí se plasmaban a contra luz: en la sombra.

Este extraño y sensible personaje, elucubraba cada noche todas las formas posibles de despertar en sus congéneres la voluntad de hacer lo que en realidad él deseaba, experto en el arte de leer la mente pero ciego en el arte de interpretar con verdad aquellas ventanas de sentido que escapaban de otras mentes y que él, encerrado en su mundo, se apropiaba con maldad.

Llegó el día en que el espejo mágico de la oruga iluminó un resquicio de su cueva, desde entonces, sólo hay una pregunta que lo obsesiona: ¿Quién eres cuando te miras sin contra luz?

Agotado de este destello, se fue acercando a este rincón, poco a poco, hasta que logró descifrar su reflejo y al ver a la oruga se extrañó.

La oruga, impaciente ante el testarudo chimpancé, le contestó: algunos somos lo que llegaremos a ser, por ejemplo, yo soy mariposa; otros, en cambio, son lo que no dejan ver, y éstos, los esclavos de las apariencias, nunca pueden verse a contra luz sin ser engañados por las sombras.

A pesar de tan injusto presagio, este pequeño y gentil chimpancé estuvo dispuesto a renunciar por un instante a su absoluta verdad, en ese instante se abrió la caverna y descubrió que no era un espejo lo que alumbraba el resquicio de su ser, era un mundo entero por descubrir lo que iluminaba con magia su estar. Así, comprendió que la luz no tiene mensajeros.


Y tú ... ¿quién eres cuando te miras sin contra luz?

Hasta mañana dulces y hermosas tortugas de todos colores.




domingo, 14 de marzo de 2010

alegría

y descanso.

Tras horas de largo sueño, la mente se despierta con un nuevo ímpetu pero el cuerpo se agota más y más, una vez que se relaja de las tensiones que con el pasar de los días acumula.

Un poco de cine en casa y antojitos de domingo aligeran el trabajo físico por recuperar energías y esfuerzos.

Sin antes meditar un poco sobre los alegres motivos del amor que maravillan el alma. Un mínimo gesto que te recuerda a quién le pertenece tu corazón y la paz de saberte en armonía al descubrir con certeza la mirada que traspasa tus ojos y la presencia que estremece tu piel.


Y tú... ¿cómo descubres la alegría al descansar?

Hasta mañana amigas tortugas.

viernes, 12 de marzo de 2010

de adioses

y bienvenidas...

Imperceptible es cuando el tiempo de acompañar una grata amistad se cumple. Sin morir, sin enojo, sin un roce mínimo de adiós. Simplemente, la distancia que se abre para emprender un nuevo vuelo. El cariño infranqueable que no cesa, a la par del sonido indiferente que pierde su resonancia en quien fuera durante años un gran confidente de vida.

La señal de la estrella al amanecer anuncia la llegada del verdadero amor y dulcemente se alimenta la ilusión de saber que sirena y delfín juntos quieren viajar. Ilusión: llena de paz y sonrisas...

La princesa se ha vuelto sirena -o quizá la sirena al fin se sabe princesa-, descubre la puerta soñada en medio del mar... [una vez que ha cerrado, una a una, las ventanas del desierto de ayer] Y convencida se prepara para recibir con mucha alegría a su mágico delfín.


Y tú ... ¿cómo descifras tus adioses y tus bienvenidas?

Hasta mañana hermosas tortugas.





jueves, 4 de marzo de 2010

vida que pasa

y vuela...

Existen certezas que sólo se descubren con el paso de los años, años que parecen siglos. Días eternos que se revelan con miedo de ser, el espejo que te muestra el rostro otro de quién quieres ser, el reflejo del alma ajena que te enseña tus errores, la mirada esquiva que te interroga sobre tus defectos, el silencio sordo que grita ante la arbitrariedad de tu juicio.

En las huellas del ayer te descubres renacido e incluso pierdes un pedazo del mañana para dar cabida al umbral de tu alegría de ser.

La felicidad sin cifrar es aquella que todavía vale la pena, ese beso que borra lo que en momentos desgajados y rotos llamaste dicha, el abrazo que hace de ti un sólo sol en donde la luna llena brilla todas las noches.

Lo feliz, con magia de tortuga, no se remite ni se acota al placer de un medio día. Y el baile que acompaña esta magia perdura con vejez y ternura, a la vez que se enciende cual joven pasión.

El secreto ... esa paciente espera de amar.


Y tú ... ¿cómo descubres el sello de tu alma al envejecer?

Abrazo de sol con mágica serenidad de tortuga para todas y todos.




miércoles, 3 de marzo de 2010

apoyar

o ayudar...

En medio de la selva, se tropezó un elefante travieso. Al caer, una cigüeña le preguntó: ¿te ayudo?

El elefante, desesperado, respondió: ¡sí por favor!

Entonces, la cigüeña lo envolvió en una manta y lo transportó hasta la cima de una montaña. Cuando ella se marchó, él trato de levantarse y emprender camino, entonces, descubrió que tenía roto un pie y volvió a tropezar. A lo lejos, escuchó una voz... era un águila de oro amarrada a una roca, le preguntó: ¿te ayudo?

El elefante, sorprendido, exclamó: ¡¿cómo?!

Te puedo enseñar a volar con tus orejas para que vuelvas a tu selva y encuentres apoyo.


Y tú ... ¿cómo ayudas?

Magia de tortuga para todas y todos.




lunes, 1 de marzo de 2010

el oráculo de la mariposa

Empieza el tercer mes del año y las monedas chinas traen en su canto -con el vuelo de la mariposa azul: La verdad interior...

"el corazón está libre de prejuicios para acoger la verdad"

"tan sólo allí donde lo recto, la constancia, constituye el fundamento, la unión seguirá siendo tan sólida que triunfará de todo"

"la más elevada comprensión, que sabe perdonar, se consideraba como la más alta justicia"

"verdad interior significa confiabilidad" ...


"los delfines nacen en el mar y anuncian a los barcos la llegada de un viento... el viento por llegar se anticipa mediante señales seguras y entonces los delfines emergen a la superficie, así pues, la verdad interior es el medio para comprender el porvenir"


Y tú... ¿reconoces la música de tu verdad interior?

Hasta mañana mágicas tortugas.