martes, 12 de agosto de 2008

asombro ciudadano

La carretera México-Cuernavaca, tanto la federal como la autopista, sufre estragos. Si alguien sabe de una vía de denuncia del estado en el que se encuentran a partir de marzo de este año, por favor dígame cuál es. Desde entonces, comenzaron arreglos que en medio de lluvias y retrasos no terminan. Pero que convirtieron sus sendas en un recorrido sin señalización ni seguridad. Se olvidaron de trazarla, y los focos "fantasma" desaparecen uno a uno sin ser reemplazados, ni pintura blanca, ni pintura amarilla, pierdes el camino por la noche y de pronto frente a ti una curva al abismo. Tras varios accidentes, recolocaron las señales de curva peligrosa, pero chuecos, volteados y ya perdieron el trazo del camino. Suma parches, se cubre de negro y como escalones todavía conserva viejos trayectos que dejan asomar algo de la señalización. Esto en lo que compete a la federal. La autopista, en cambio, es un destello de luces al salir de la caseta ya que colocaron unos focos "fantasma" que brillan doble y uno no sabe si anda borracho o simplemente es invitado a la carretera de la muerte, pues los carriles se duplican y centellean. Parece que fueron notificados, pues de pronto este desafortunado tramo concluye y empiezan a desaparecer y escacear los siguientes focos "fantasma", así como la pintura se desvanece aceledaramente. Introdujeron tuberías y ahora quedaron parches de asfalto en desnivel, lo cual para una autopista es altamente riesgoso. Repintan los trazos sin precisión y ahora está doble o triplemente trazada, así que a la hora de tomar la curva y amarrarte, te tiembla la mano y ya no sabes si vas a salir derrapando, porque la línea ya no corresponde a la curva que garantizaba el ángulo de maniobra adecuado. Por lo mismo, los accidentes se acrecientan. Las lluvias dejan charcos que hacen que patinen las llantas. Otras partes se quiebran y empiezan a verse potenciales "hoyos" en el pavimento. El mantenimiento inutiliza por días carriles enteros y de todos modos es insuficiente. En enero, al bajar la cuota 5 pesos dije ¡gracias! ¡qué buena noticia! Ahora que el camino se empieza a volver un remedo de lo que era, que obviamente quien la administra no la maneja y que se vuelve un riesgo su trazo cuando era inmejorable, realmente me indigna que en sólo 8 meses ya no quede sombra de esta autopista y que sólo dé visos de que empeorará.

Será que alguien podrá recuperar estas carreteras para sus usuarios o debemos acostumbrarnos a vivir así. Sin caminos ni seguridad.


Y tú ¿de qué te asombras?

Hasta mañana.


No hay comentarios: