martes, 9 de abril de 2019

te extraño...

... mi amor.



Te extraño cuando duermo, al despertar, en medio de mis sueños, cuando te escucho, cuando te recuerdo, cuando te leo, cuando te veo de reojo. Cuando canto, cuando río, cuando miro al sol, cuando una mariposa llega a mi ventana, cuando el mundo se quiebra, cuando es tiempo de festejar, cuando recibo buenas noticias, cuando estoy triste y también cuando estoy feliz. Te extraño cuando llueve y frente al mar.

Te extraño en tus viajes. En tu descanso. Si me extrañas. Y te extraño con angustia cuando sé que me necesitas. Si estás triste y más aun si eres feliz. Te extraño cuando me piensas. Te extraño cuando nuestras manos se tocan. Te extraño cuando no podemos tocarnos. Cuando nos vemos y cuando intuyo que me sueñas. Te extraño en tus batallas. En tus triunfos y en tus derrotas. Te extraño en todas tus causas. Te extraño en nuestra fe. Te extraño en cada una de tus palabras.

Te extraño cuando miró atrás y descubro el tiempo que nunca más podremos recuperar, te extraño cuando ansío nuestro presente, te extraño cuando sueño con el futuro. Te extraño cuando escribo, te extraño a través de todas las canciones que acompañan mis días. De día, de noche, cuando llega la tarde y cuando amanece. Te extraño conmovida de sentirte y saberte. Te extraño bajo el brillo de la luna. 

Te extraño cuando la espera me quiebra. Te extraño cuando la espera me alienta. Te espero y te extraño entre sonrisas y llanto. Y te extraño más al pensar que algo pueda evitar vernos otra vez... Te extraño cuando temo que me olvides o mi roce te lastime. Te extraño cuando siento que te regalo alegría y que brilla tu rostro de felicidad. Te extraño cuando me siento plena y te extraño cuando dudo de mí. Te extraño estando rota. Te extraño estando entera.

Te extraño cuando descubro tu aliento. Cuando me regalas la maravilla de tu ser. Cuando apareces ante mí. Cuando me sudan las manos y tiembla mi piel. Cuando me sorprendes como sólo tú sabes hacerlo. Cuando me regalas una rosa y cuando me miras sin mirarme. Te extraño cuando me abrazas y cuando extraño tu abrazo. Extraño los besos que nunca nos dimos. Te extraño cuando sé que amas. Cuando quiero decirte que te amo. 

Te extraño en silencio... en secreto. Tímida y sin miedo... te extraño. Te extraño y alzo la voz. Te extraño cobarde. Te extraño valiente. Con alevosía y con ternura. Te extraño apasionadamente. Necia y también cediendo todo ante ti. Te extraño cuando estamos de acuerdo y te extraño con más anhelo cuando pensamos diferente. Te extraño sin prejuicios. Te extraño descaradamente.

Te extraño cuando nace la esperanza bajo tu luz. Te extraño de saber que tan cerca y tan lejos estuvimos. Te extraño bailando. Si me miro en el espejo y si me escondo bajo las sábanas. Te extraño si siento que te ausentas. Te extraño cuando apareces sin anunciarlo. Te extraño cuando fallo en comprenderte. Te extraño cuando comprendo con exactitud tus mensajes. Cuando hay confusión y cuando hay claridad. Te extraño con anticipación y con demora. Te extraño ahora. Te extraño siempre.

Simplemente... te amo.


Y tú... ¿a quién extrañas?


Que los días
se llenen de magia
de tortuga...
de la mano de su caparazón.
No olviden amar
mágicas tortugas
... con maravilla.
¡Feliz martes!



Letras para guardar en el corazón.
Feliz abril mi única y mágica tortuga.
Fuerte abrazo.



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