miércoles, 15 de octubre de 2025

dulzura...

 ... y calidez.



La ternura puede definirse por ese cálido sentimiento en donde la dulzura se manifiesta tenuemente. Basta un gesto... una palabra. Un leve movimiento. ¿Cuántos leves movimientos acompañan nuestra vida que, sin percatarnos, nos invitan a la ternura? Entre humanos es fundamental ser capaces de mostrarnos con amabilidad. Con empatía. Con dulces palabras y cálidas muestras de afecto y solidaridad.

¡Cuánto cuesta a veces procurar un bello gesto! Como si el ensimismamiento nos limitase a abrir nuestro corazón. Encerrados en corazas, que no caparazones de tortuga mágica, habitamos un mundo que aparece colmado de hostilidades, algunas veces. Por eso es tan importante procurar en nuestros entornos cercanos encuentros amables. Lugares vitales en los que podamos confiar. Para entregarnos a nosotros mismos también con suavidad.

Muchas veces nos sentimos impedidos de ser dulces y cálidos con nosotros mismos. Es tan indispensable abrirnos en nuestro fuero íntimo y ser capaces de comprendernos con generosidad. Ser nuestros mejores aliados. Acompañar nuestros días con pensamientos positivos y alegría. Despojarnos de las preocupaciones para darnos descanso. Con ternura. Desarrollar en nosotros leves movimientos y cálidos gestos que nos invadan de dulzura. Sólo así podemos abrirnos al mundo con la misma suavidad.


Y tú... ¿te amas con ternura?


No hay comentarios: