Mucha preocupación surge ante la política de austeridad en proceso de instrumentación por parte del nuevo gobierno de México. Así como, también hay reservas y cautela acerca de la frontera sur de nuestro país. Y sobre los resultados que pueda brindar el sistema anticorrupción. En especial, la gestión de los fiscales, el nombramiento de cargos públicos troncales para tales beneficios esperados y la efectiva capacitación de mandos medios. Finalmente, la interrogante sigue latente sobre la garantía de protección de los derechos humanos, sin escatimar en las señales positivas que ha dado el Estado en dicha materia.
En conclusión, la pregunta es ¿se podrán revertir las inercias de las malas prácticas que nos socavan? ¿existe un diseño certero en el plan de austeridad? ¿se volverá efectiva la reforma constitucional del 2011 en lo que concierne a derechos humanos? ¿cómo?
Es importante desapegarnos del pasado. Desarticular el andamiaje sobre el cual operaban la ineficacias de los aparatos gubernamentales es una prioridad. No todo lo que está escrito en papel fue llevado a la práctica correctamente. No todo lo que funciona con márgenes razonables de efectividad opera sin corrupción. Es decir, el mapa va cambiando, las coordenadas: también. Redefinir el problema de la migración e innovar en soluciones y adjudicar recursos proporcionales a la dificultad que enfrentamos, para obtener resultados reales en este tema, es también un paso al frente.
Subestimar estos retos, con base en discursos que van perdiendo vigencia frente al pragmatismo que se antepone al buen decir, es un error. Colaboremos, entonces, en hacer de nuestros miedos un instrumento que ayude a las soluciones y abone a los cuestionamientos que nos ocupan cuando se trata de valorar y analizar el curso de los acontecimientos. Con libertad y generosidad. No confundir la cautela con el conformismo de un status quo endeble, a todas luces. No confundir diálogo con confrontación. No confundir información con ideología. No confundir juicio crítico con opiniones personales cargadas de subjetividad.
El reto que hoy todos y todas compartimos es el dominio de la praxis. Asignatura pendiente desde el origen la modernidad.
Y tú... ¿sabes cómo llevar a la práctica el discurso?
Feliz miércoles
queridas mágicas
tortugas.
Que el amor
de nuestros caparazones
ilumine los caminos
de la praxis.
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