Esta tarde y preparando todo para el inicio de la semana, los pays ya listos para repartirse mañana, el sol dejándose ver entre los árboles y a punto de recibir la noche en luna creciente, les voy contar la historia de una tortuga mágica neoyorquina.
Silenciosa, cuasi encriptada, recibe mi llamada llena de ternura y contento.
Ella partió tras su destino de la mano de su tortuga para acariciar sueños de vida, de reflectores y sonido. Dispuesta a adoptar una nueva patria e ilusionada ante el reto de reinventarse.
Déjenme platicarles el secreto de esta tortuga a quien nada amedrenta. Ella no se detiene ni se cansa, se renueva y no deja que los recuerdos la secuestren ni por un instante. Llena de entusiasmo abraza los caminos de la incertidumbre y, cual alma moderna, se mimetiza con los avances de la teconología como si nada le fuera extraño, gran coleccionista de música y asidua a elegantes pasatiempos. Siempre va uno, dos, tres, cuatro... pasos delante de ti. Mostrándote el camino, abriendo los senderos. Corrigiendo las rutas y haciendo tu andar más suave, certero y seguro. Y casi sin palabras, con el sólo tono de su voz, te dice que te sabe y te siente. Tortuga de batallas, logró ver el fondo de su ser, conoció demonios y fantasmas, festejó hasta su último suspiro y encontró el camino de vuelta al sol del amanecer, la brisa del mar y la calma ante la tempestad.
Gracias mi tortuga neoyorquina, llena de magia y esperanza, por enseñarme los caminos del bien y del mal, sacudirme del ayer y hacerme ver hacia adelante una y otra vez. Gracias por encontrar el tren de regreso a tu corazón.
Y tú ¿de dónde quieres volver?
Domingo de descanso y gustoso lunes... Hasta mañana.
VISITEN LA LUZ DEL SABER, LA MAGIA DEL PAY Y LA HAZAÑA DE LA ARAÑA.... gracias por sus visitas, comentarios y pedidos. Terapia y estudio los espera para compartir.
mlojiux@yahoo.com
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